Los 3 tipos de gérmenes
más comunes
Los gérmenes son unos microorganismos que no son visibles a simple vista y que afloran en lugares donde se acumula la suciedad. Dentro de la palabra germen incluimos diferentes tipologías como son los virus, las bacterias o los hongos; por eso, es importante conocer mejor cada uno de ellos para que podamos eliminarlos y vivir en un espacio más seguro.
La acumulación de gérmenes puede propiciar la aparición de enfermedades o infecciones entre las personas que conviven con ellos. Por ello, es esencial limpiar bien los espacios y evitar que estos microorganismos puedan acumularse.
Los 3 tipos de gérmenes que más abundan en la sociedad son los siguientes:
Bacterias
Como ya hemos comentado, uno de los tipos de gérmenes más habituales son las bacterias. Las bacterias son organismos unicelulares que pueden reproducirse fuera del cuerpo humano. Se reproducen de forma muy rápida y son las causantes de la aparición de condiciones como, por ejemplo, los dolores de garganta, los resfriados o, incluso, la caries.
Sin embargo, debemos saber que existen bacterias que son buenas para el funcionamiento del organismo, sobre todo, para mejorar el sistema digestivo. Los yogures, por ejemplo, son alimentos ricos en probióticos, bacterias vivas que fortalecen la flora intestinal y mejoran la asimilación de los nutrientes.
Para lidiar contra enfermedades causadas por bacterias, los profesionales de la salud médica prescriben la toma de antibióticos, fármacos que inciden de forma directa sobre estos gérmenes.
Virus
Los virus son otro de los tipos de gérmenes más comunes en nuestra sociedad. Se trata de un microorganismo más pequeño que la bacteria y que, a diferencia de esta, sí que necesita un ser vivo para poder sobrevivir. Es decir, un virus en una superficie material terminará muriendo, una bacteria no. El organismo al que se adhiere el virus se conoce con el nombre de huésped y puede ser tanto una persona, como una planta o un animal.
Cuando el virus se instala en el interior del cuerpo humano puede llegar a afectar el funcionamiento del organismo sobremanera. Dependiendo del virus con el que nos encontremos, puede provocar la aparición de enfermedades como la gripe, la viruela, la malaria, el coronavirus, etcétera. Para combatir la agresión de los virus, los médicos emplean antibióticos que luchan contra la presencia del virus en el cuerpo.
Hongos
El último de los tres grandes tipos de gérmenes son los hongos, organismos que pueden ser uni o pluricelulares y que se alimentan de seres vivos (plantas, animales o personas). Proliferan en espacios húmedos y cálidos y, aunque afectan el bienestar del organismo al que se adhieren, lo cierto es que no son peligrosos para la salud. Un hongo difícilmente puede poner en peligro nuestra vida, en cambio un virus o una bacteria sí.
Los hongos pueden aparecer tanto de forma externa (los hongos de los pies son los más comunes), como de forma interna (los hongos vaginales son también muy comunes entre las mujeres). Dependiendo del tipo de hongo con el que nos encontremos, el profesional nos prescribirá un tratamiento concreto. La gran mayoría de fármacos son antifúngicos y ayudan a eliminar el hongo del organismo.
¿Cómo se transmiten
los gérmenes?
Ahora que ya conoces qué son los gérmenes y los diferentes tipos más comunes con los que convivimos, terminaremos este artículo hablando sobre las principales vías de transmisión. Son las siguientes:
- Contacto físico. Si una persona está infectada con uno de estos gérmenes, puede contaminar a otra persona sana por medio de los fluidos corporales.
- Por aire. Algunos gérmenes se transmiten por el aire.
- Las gotas de Flügge. Las gotitas que desprendemos al hablar, estornudar o toser son conocidas como las gotas de Flügge y son una de las principales vías de transmisión de los gérmenes.
Para poder evitar contagiarnos con alguno de estos gérmenes, se recomienda extremar las medidas de higiene, tanto de forma personal, como en nuestros hogares. Contar con una casa limpia y desinfectada es esencial para asegurarte un espacio seguro en el que vivir. La higiene romperá la cadena de contagio y evitará la proliferación de los gérmenes en tu hogar.