Dadas las inclemencias del tiempo, durante los meses de otoño e invierno es cuando más se ensucian las persianas. Con el paso de los meses, la suciedad se va acumulando hasta convertirse en una tarea engorrosa que debemos asumir con la llegada del buen tiempo.
Dentro de la limpieza general, no hay duda de que esta es una de las labores que más pereza nos da, más aún cuando nos toca limpiar las persianas a fondo por todo el polvo y suciedad adheridos.
Desde aquí te vamos a mostrar algunos consejos para que sepas cómo limpiar persianas por fuera, algo que resulta muy complicado para muchas personas.
Consejos para limpiar persianas por fuera
Antes de ponerte a limpiar cualquier tipo de persiana por fuera debes pensar ante todo en la seguridad. Dicho esto, toma nota de estos trucos sencillos que te ayudarán a dejar tus persianas limpias de forma sencilla, segura y efectiva
Con acceso al exterior
- Si tienes acceso al exterior, todo resultará más fácil. Lo único que tendrás que hacer es ir bajando la persiana, de forma que las lamas estén abiertas para poder limpiar las ranuras, que es donde suele acumularse más suciedad.
- Acto seguido, cepíllala de arriba abajo con ayuda de un cepillo de cerdas blancas. De esa manera te desharás de gran parte de la suciedad. Después de hacerlo, aspírala por dentro y por fuera para librarte de todo el polvo que haya quedado alrededor y entre las ranuras.
- Es el momento de pasar una bayeta con agua y jabón neutro por cada lama. Asegúrate de hacerlo de izquierda a derecha y de arriba abajo para evitar ensuciar lo que vayas limpiando. Durante este proceso, no olvides cambiar el agua cuantas veces sea necesario para que esté limpia.
- Una vez hecho, sécala con ayuda de un trapo de algodón. No olvides dejarla desenrollada para limpiar la parte de dentro.
Sin acceso al exterior
- Si no tienes acceso al exterior, la cosa se complica. La solución por la que apuestan muchas personas consiste en abrir el cajón superior donde va enrollada la persiana.
- En este caso, el proceso es sencillo. Con ayuda de una escalera y un cubo de jabón neutro y agua, ve limpiando poco a poco la parte visible de la persiana enrollada. Según lo vayas haciendo, tendrás que ir desenrollando la persiana hasta haber limpiado la persiana al completo. Repite el procedimiento las veces que sean necesarias hasta que el trabajo esté finalizado.
- Existen otras alternativas que te llevarán a saber cómo limpiar persianas por fuera. Solo tienes que utilizar tu imaginación para limpiar esa parte exterior que tanto nos incómoda sin necesidad de abrir la caja superior. Una forma de hacerlo puede ser utilizar una mopa, que previamente habrás customizado para adaptarla a este trabajo. Bastará con añadir un paño bastante amplio y sujetarlo bien con pinzas.
A decir verdad, este último método puede parecer un poco descabellado, pero funciona y mucha gente ha apostado por él para limpiar las persianas. Aun así, todo dependerá de lo que a ti te resulte más cómodo. ¡Tú decides!
¿Qué hacer cuando el jabón y el agua no sirven?
A veces, el jabón neutro y el agua no son suficientes para limpiarlas bien. No se trata del material en el que ha sido fabricada, sino de la propia suciedad, que al quedarse tan pegada, resulta difícil eliminarla. Utilizar productos específicos que no sean abrasivos son la mejor opción para que luzcan como el primer día. Es el caso de [KH7_Quitagrasas], un producto seguro y rápido que te facilitará mucho la tarea.
Los productos quitagrasas funcionan de forma eficiente y solo necesitarás un cubo de agua y una bayeta para dejar tu persiana por fuera impoluta. Primero pulveriza la superficie con el quitagrasas, deja actuar unos minutos y limpia el producto con una bayeta humedecida con agua. Aclara bien la superficie para que no quede ningún rastro y habrá terminado (si tienes a mano una vaporeta eléctrica, mucho mejor).