La limpieza con vapor es una técnica que consiste en la limpieza con aspiradores o máquinas que funcionan con vapor de agua. Un agua que se calienta en un calderín interior y sale en forma de vapor a presión. Así, a mayor presión el vapor, mayor poder de limpieza. El vapor se ha convertido en una excelente herramienta para llevar a cabo no solo tareas de limpieza, siendo también ideal para la desinfección, desengrasado y otras tareas en las que se precise poder de arrastre y desincrustación de la suciedad.
Así, los aparatos de limpieza a vapor tienen la potencia suficiente para eliminar por completo las manchas incrustadas en superficies como suelos de baldosa, piedra, cemento, así como en alfombras y mobiliario.
Los beneficios de la limpieza con la tecnología de vapor a presión son muchos, siendo especialmente destacable su sostenibilidad al no ofrecer riesgos de intoxicación y alergias, además de requerir un menor coste de mantenimiento. También es más cómodo al ser muy versátil y poder emplearse para la limpieza de múltiples superficies.
Así, puede utilizarse para la higiene y desinfección en azulejos, cristales, alfombras, sanitarios, etcétera, además de poder usarse para realizar gran número de tareas, desde planchar la ropa a desengrasar.
También es un potente desinfectante, eliminando ácaros y bacterias e higienizando superficies al limpiar, desinfectar y eliminar malos olores sin ser necesario utilizar productos de limpieza.
Las máquinas y aspiradores de vapor tienen diferentes tamaños, existiendo modelos de pequeño tamaño y portátiles. Unos aparatos ideales para realizar la limpieza del día a día con la garantía de una higiene profunda y ecológica.