Higienizar significa limpiar un espacio, hacer que se vuelva higiénico, es decir, limpio. La higienización en el hogar, la empresa o una fábrica resulta ser fundamental para preservar un ambiente saludable y que mantenga los máximos estándares de calidad de vida.
Los elementos sucios y ambientes descuidados no solamente contaminan sino que también contribuyen a la proliferación de diferentes tipos de gérmenes los cuales pueden afectar directamente en la salubridad. Por ejemplo, la limpieza en las diferentes cocinas donde se llevan a cabo diferentes tipos de actividades debe realizarse de manera correcta para mantener una seguridad alimentaria y evitar cualquier clase de problemática a futuro.
Diferenciación entre higienización limpieza y desinfección
A pesar de que los vocablos de limpieza, desinfección e higienización pueden ser empleados como conceptos sinónimos cada uno presenta características diferentes debido a que hacen referencia a un proceso diferente. Las características específicas que presenta cada uno son las siguientes:
- Limpieza: Hace referencia a la eliminación de cualquier clase de residuos, ya sea restos de alimentos y otros desechos que puedan quedar sobre las diferentes superficies del hogar, la compañía o en una fábrica, para evitar la proliferación de microorganismos.
- Desinfección: El proceso de desinfección es eliminar completamente cualquier clase de microorganismo que puede estar presentes sobre diferentes tipos de superficies además de utensilios de trabajo. Es un proceso que elimina los residuos no visibles.
- Higienización: Es el proceso por el cual se combinan las dos técnicas anteriores de limpieza y desinfección. En los diferentes centros de trabajo se suele llevar a cabo un plan de higienización periódica para garantizar los máximos estándares de salubridad. En el plano doméstico también se debe considerar efectuar una higienización, empleando diferentes tipos de productos que se venden de manera comercial.