El término blanquear tiene distintos significados, haciendo siempre referencia al proceso de hacer que algo se vuelva blanco de manera literal o, ya de simbólica, se trate limpiar la imagen de alguien o dar un aire legal a acciones u objetos ilegales.
Una de las definiciones más ad hoc es la de pintar algo de color blanco o aplicar una técnica o un tratamiento para que algo se vuelva más claro.
Por lo que refiere a la limpieza, blanquear puede aplicarse tanto al blanqueamiento de paredes con yeso diluido para sanear y desinfectar las fachadas de las casas, como al blanqueo de la ropa con manchas amarillentas o al proceso de sacar color a la plata, al oro o a cualquier otro metal.
Otro de los significados de blanquear tiene que ver con la gastronomía y refiere uno de los procesos de escaldado de los alimentos, esto es, meter un alimento en agua hirviendo durante unos 30 segundos. Una técnica que permite limpiar y ablandar vegetales o hacer más sencillo retirarles la cáscara o piel.
Por lo que respecta al campo de la limpieza, blanquear es toda aquella técnica de limpieza que nos permite recuperar la blancura de objetos o ropa. Así, contamos con numerosos trucos para blanquear los aparatos sanitarios, las juntas de los azulejos, de las baldosas del suelo o el blanqueo de camisetas, camisas, ropa de cama, manteles, etcétera.
La lejía, el oxígeno activo, el vinagre blanco de limpieza, el bicarbonato y una gran variedad de productos de limpieza blanqueantes son ideales para conseguir o recuperar la blancura.