El calzado es, sin duda, el complemento de vestir que más se ensucia. Entre ellos, las zapatillas, y sobre todo las que son blancas, se manchan en exceso. Al ser un calzado cómodo, que utilizamos para nuestro día a día, o para hacer deporte de interior y exterior, sufre más que el resto.
Además, seguro que todos tenemos algún par de zapatillas que utilizamos más, y cuando las limpiamos queremos dejarlas como el primer día.
En este artículo te contamos cómo limpiar cualquier tipo de zapatilla, sea de polipiel o tela. Incluidos los cordones, y la suela.
Es importante que, si quieres alargar la vida a tus zapatillas, las laves siempre a mano, y nunca las introduzcas en la lavadora.
Limpieza de zapatillas de tela y cordones:
Si se trata de eliminar la suciedad que se hace del uso (polvo de la calle), tan solo tendrás que dejarlas a remojo con agua muy caliente (30º-40ºC), dos cucharadas de percarbonato en polvo o algún otro producto con oxígeno activo, un chorrito de vinagre, y aprox. una cucharada de jabón que contenga glicerina. Los más conocidos son los jabones en escamas. Se diluye esta mezcla y se introducen las zapatillas durante mínimo 30 minutos.
En caso de existir otro tipo de manchas (aceite, grasa, salsas…), aplicar KH-7 Sin Manchas antes de introducirlas a remojo. Y si son manchas de hacer deporte, sudor, humedad, vino… aplicar KH-7 Sin Manchas OXY. Con dejarlo actuar 5-10 minutos, suficiente.
Se diluye esta mezcla y se introducen las zapatillas durante mínimo 30 minutos
Una vez haya actuado la mezcla, con ayuda de un cepillito, frotamos toda la superficie de la tela hasta que limpiemos la suciedad. Después aclararemos con agua tibia, y dejaremos secar.
Realizaremos el mismo procedimiento para los cordones, ya que también son de tela.
Limpieza de zapatillas de polipiel:
En el caso de zapatillas de polipiel, la limpieza es mucho más sencilla debido al tipo de material. Tan solo necesitaremos limpiar la superficie con un paño mojado con agua tibia y jabón lavaplatos. Una vez limpias, utilizaremos otro paño mojado para aclarar. Si además queremos blanquearlas un poco, podremos utilizar agua oxigenada en vez de normal.
Otros trucos alternativos son: utilizar toallitas húmedas o pulverizar KH-7 Quitagrasas y limpiar con un paño mojado.
Para limpiar la superficie de la zapatilla utilizamos un paño mojado con agua tibia y jabón lavaplatos
Limpieza de suela
La suela es el elemento que más nos cuesta limpiar, ya que es la superficie que más en contacto está con el suelo y, por tanto, la parte que más se ensucia. Para su limpieza, haz una pasta de bicarbonato con agua oxigenada y déjala actuar unas horas. Después, frota con un cepillito (sirve uno de dientes) y aclara con agua. También puedes utilizar pasta de dientes y realizar el mismo procedimiento.
¡Ahora ya podrás tener tus zapatillas como el primer día!
Un abrazo, Paula
